De Primera .. la Dama de la Noticia.
Por: Arabela García.
*México en la Encrucijada: Elecciones Marcadas por Violencia y la Posibilidad de una Presidenta.
*Violencia Electoral y Seguridad: López Obrador Asegura Estabilidad Política a Pesar de los Asesinatos.
*Elecciones Históricas en México: Más de 50 Asesinatos y un Futuro Incierto para los Candidatos.
Ahora sí que no hay vuelta de hoja: el próximo domingo seremos testigos de un nuevo proceso democrático en la historia de nuestro país, marcado por varios aspectos significativos, como la posibilidad de que una mujer se convierta en presidenta de México, la creciente inseguridad y los asesinatos de diversos candidatos y sus familiares.
La preocupación por posibles disturbios debería disiparse con las declaraciones del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien asegura que «hay estabilidad política» en el país, a pesar de la violencia electoral que se ha intensificado en el contexto de las elecciones presidenciales del próximo domingo.
En los últimos meses, al menos 36 aspirantes a cargos públicos han sido asesinados en el país. Según AMLO, estos actos violentos están «muy localizados» y no afectarán el correcto desarrollo de las elecciones, que serán las más numerosas en la historia del país en términos de votantes y cargos a elegir.
Aunque la violencia y los incidentes se han extendido por diversos estados, el presidente atribuye estos hechos a cuestiones políticas y afirma que en México hay estabilidad política, asegurando que se puede viajar por todo el país. Reconoce que persisten problemas de inseguridad, pero insiste en que están muy localizados y que no deben ser motivo de preocupación.
En este sentido, el líder del partido gobernante Morena subrayó que «la gente está muy contenta y relajada», y pidió a los ciudadanos que «se serenen, se tranquilicen, ya van a pasar las elecciones».
A pesar de las declaraciones de López Obrador, analistas y funcionarios de seguridad advierten que los cárteles están sembrando el miedo en las contiendas a nivel local, expandiendo su influencia a través de la extorsión, el tráfico de migrantes y la producción de alimentos.
Para aumentar la sensación de terror, no solo los candidatos sino también sus familiares están siendo atacados, con al menos 14 de ellos asesinados en los últimos meses. El caso más reciente ocurrió el sábado, cuando el líder de Morena en Chiapas, Manuel Pérez Sánchez, fue asesinado a tiros en el municipio indígena de Simojovel.
The New York Times destacó que la violencia electoral ha afectado estados que antes no habían experimentado este tipo de ataques, especialmente en Chiapas, el estado más pobre de México. En esta región, sumida en masacres debido a la lucha de dos cárteles notorios y varias facciones por el control de la frontera con Guatemala, al menos seis candidatos han sido asesinados desde diciembre.
«Estos candidatos quedaron desprotegidos porque no hubo una intervención rápida del Instituto Electoral del Estado y del Gobierno estatal», dijo al periódico neoyorquino Jesús Ramírez Garibay, secretario general del Comité Estatal de Morena en Guanajuato. «Comenzaron sus campañas bajo su propio riesgo, solo con la bendición de Dios», agregó.
La semana pasada, López Obrador informó que más de 500 candidatos mexicanos reciben protección debido al riesgo de violencia, custodiados por unos 3.000 agentes. «Si no hubiera inseguridad y violencia, no tendríamos que atender a estos políticos para ser protegidos», admitió.
En este contexto, la Organización de Estados Americanos (OEA) expresó su preocupación por los incidentes de violencia en el contexto de estas elecciones y lamentó particularmente la pérdida de vidas humanas.
El próximo 2 de junio, más de 98 millones de ciudadanos están llamados a las urnas para renovar más de 20.000 cargos, incluida la presidencia, los 500 diputados y los 128 senadores, así como nueve gobiernos estatales, incluido el de Ciudad de México.
El riesgo de ser candidato en México es evidente: ya suman 50 los asesinatos vinculados a las elecciones. De estas víctimas, 26 eran aspirantes a un cargo de elección popular, mientras que el resto eran familiares, políticos o funcionarios.
En total, el laboratorio de ideas registró 156 agresiones a personas relacionadas con los comicios, que incluyen además de los asesinatos, nueve secuestros, 22 atentados y 75 amenazas. Los partidos con mayor número de aspirantes asesinados son Morena, con nueve, y el Partido Acción Nacional (PAN), con cinco.
La investigación reveló que los meses con mayor cantidad de asesinatos han sido julio, octubre, enero, febrero y marzo, con un incremento del 150% en los últimos tres meses, coincidiendo con la conclusión de las precampañas y el registro de candidaturas a nivel local.
Los estados con más casos de violencia electoral son Guerrero, Veracruz y Michoacán.
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