No Hay en México Periodismo Profesional: AMLO
ENEMIGO DEL PUEBLO
Por: Sergio Sarmiento
«La crisis del neoliberalismo… es la crisis de los medios convencionales de comunicación, no sólo en México, en el mundo». Andrés Manuel López Obrador
El Presidente Andrés Manuel López Obrador se lanzó ayer contra el New York Times.
«Hace unos días», dijo, «salió en el New York Times una nota sobre el ocultamiento de muertos. El New York Times es un periódico famoso, pero con poca ética. En este caso es evidente que no hicieron un buen trabajo, que actuaron de manera tendenciosa. Faltó ética, no nos dejemos apantallar».
No es éste el primer cuestionamiento del Mandatario o de su equipo a los medios. El 8 de mayo el Subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, cuestionó que hubieran aparecido cuatro notas del New York Times, El País, el Wall Street Journal y el Washington Post poniendo en duda las cifras oficiales de la pandemia. «Llama la atención la sincronía», afirmó.
López Obrador ha descalificado una y mil veces al periódico REFORMA (aclaro interés: yo colaboro con él) así como a otros medios y periodistas. Todos son corruptos o defensores de la corrupción, con excepción de aquellos que lo alaban siempre.
Los mismos ataques ha lanzado contra las redes sociales, como Twitter y Facebook, que antes consideraba «benditas», porque ahora son mercenarias y se enriquecen vendiendo «publicidad a bots».
«Nos defienden creo que tres y estoy hablando de periodistas», ha dicho. «¿Quiénes defienden, en estos últimos días? Federico Arreola, que nos defiende, enfrenta toda esta campaña de calumnias, Enrique Galván, de La Jornada, Pedro Miguel».
Para el mandatario no hay medias tintas. «Estás a favor de la transformación o estás a favor del régimen de corrupción y de privilegios. Desde luego que hay matices, pero aquí sí es de definiciones».
«No hay en México un periodismo profesional», ha declarado López Obrador, pero tampoco en Estados Unidos, España o el Reino Unido. Si hoy acusa al Times de falta de ética, en 2019 exigió disculpas al Financial Times por «quedarse callado mientras se imponía la corrupción en el País» y por aplaudir las «reformas estructurales».
López Obrador no es el único gobernante que sostiene que los medios son el villano más perverso. El estadounidense Donald Trump advirtió ayer en Twitter: «EL ENEMIGO DEL PUEBLO. Tristemente, nuestros lastimosos medios son TOTALMENTE CORRUPTOS» (sus mayúsculas).
Trump ha atacado constantemente a medios que considera corruptos y «enemigos del pueblo»: el New York Times, el Washington Post, las cadenas de televisión CNN, CBS, ABC y NBC. Los únicos medios honestos en su país son, para él, Fox News y el derechista conductor de radio Rush Limbaugh, a quien entregó la medalla presidencial de la libertad en febrero.
La misma actitud despliega Jair Bolsonaro de Brasil, quien en marzo calificó de «fantasía» la pandemia de Covid-19 y consideró que ésta no es más que el producto de una cobertura alarmista de los medios.
Los periodistas pueden equivocarse y lo hacen con frecuencia. Uno puede cuestionar sus datos, conclusiones u opiniones, pero tildar a todos de corruptos porque no aplauden es no entender la realidad ni la razón de ser de los medios.
«No, es que todo lo están tergiversando, todo, todo, todo», dijo ayer exasperado el Presidente al culpar a los medios de las reacciones por su descalificación a los médicos «del periodo neoliberal» que supuestamente sólo buscaban enriquecerse.
El problema es que las afirmaciones en que los acusó de preguntar «¿qué tienes?… ¿qué tienes de bienes?…» están ahí para quien quiera conocerlas.
FRAUDE.. Las violaciones de la Ley Bonilla «ponen de manifiesto un verdadero fraude a la Constitución», en opinión del presidente de la Suprema Corte, Arturo Zaldívar. El intento de ampliar el mandato del Gobernador Jaime Bonilla de Baja California de dos a cinco años no tuvo el respaldo de un solo Ministro.