Caída Prolongada de Precios y Servicios…
Deflaciona Pandemia.
Por: Lic. Alberto González Káram
Investigación Especial
- Recursos por 2 billones 815 mil 256 millones de pesos equivalente a 11.26 por ciento de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) que contribuyen en la reapertura económica trilateral el próximo 1o. de julio con la entrada en vigor del Tratado Comercial México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC)
- Energéticos con deflación del -15.36 por ciento en la presente administración pública al cierre de la primera quincena del mes de abril del 2020
El mayor aumento de precios que afectó a la mayoría de los trabajadores y sus familiares, industriales, comerciantes, agricultores, ganaderos, avicultores, pescadores, silvicultores, mineros, petroleros, prestadores de servicios turísticos, de salud, educación y consumidores mexicanos en general, se registró en los precios de los energéticos como la gasolina Magna, Premium y diésel; gas industrial, agropecuario, pesquero y doméstico; servicio de energía eléctrica industrial, comercial, turística y habitacional, así como los precios y tarifas de los bienes y servicios públicos autorizados por el gobierno federal, siendo acumulado un incremento del 59.91 por ciento durante la pasada administración de Enrique Peña Nieto.
La Emergencia Sanitaria de la Pandemia del Coronavirus (COVID-19) en México del 30 de marzo al 30 de mayo del 2020, se encuentra sujeta a una deflación en la canasta de bienes y servicios que está integrada por alrededor de 120 mil productos y servicios específicos agrupados en 299 genéricos con una cobertura de 91 ramas de las actividades económicas de los sectores agrícola, ganadero, industrial y de servicios, siendo reducidos los costos del consumo de la mayoría de la población mexicana que se encuentra actualmente confinada en sus hogares al demostrar y comprobar un descenso en los precios.
Es importante destacar que México cuenta con una megacobertura monetaria de 4 billones 444 mil 257 millones de pesos, siendo superior 2.48 veces al monto total de la base monetaria por 1 billón 788 mil 718 millones de pesos que permiten respaldar la totalidad de billetes y monedas que se encuentran actualmente en circulación, así como todos los depósitos bancarios en cuenta corriente de la banca comercial y de desarrollo, lo cual es injustificable desde el punto de vista monetario la creciente especulación a la que se enfrenta el peso mexicano.
El incremento positivo se registró en las reservas internacionales por 12 mil 167.6 millones de dólares al pasar de 173 mil 775.40 millones de dólares heredados por la administración de Enrique Peña Nieto a 185 mil 943 millones de dólares con un crecimiento del 7.00 por ciento en la actual administración pública federal.
Los resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registraron un crecimiento porcentual anual de 4.69 en 2018 y presentaron un descenso de 4.38 en 2019 al 2.082 por ciento al cierre de la primera quincena del mes de abril del 2020.
La deflación en los precios de los bienes y servicios se demuestra con los registros de las siguientes reducciones porcentuales que corresponden a la primera quincena del mes de abril en el período 2013-2020:
Índice Nacional de Precios al Consumidor
Variación porcentual anual en primera quincena de abril 2017-2020
Años %
2013 -0.09
2014 -0.19
2915 -0.45
2016 -0.34
2017 -0.15
2018 -0.35
2019 -0.03
2020 -0.72
Fuente: “Evolución del Índice Nacional de Precios al Consumidor en la primera quincena de abril 2013-2020”, Lic. Alberto González Káram, Presidente de la Comisión Binacional de Asuntos Fronterizos del Colegio Nacional de Economistas, A.C. (CNE) y Vicepresidente del Colegio de Economistas del Noreste de México, A.C. (CENEMAC), Investigación Especial, Abril del 2020.
Las entidades federativas que registraron una mayor inflación al promedio nacional de -0.72 por ciento en la primera quincena del mes de abril del 2020, fueron porcentualmente por orden de importancia: Nuevo León -2.10, Campeche -1.92, Coahuila -1.77, Yucatán -1.43 y -1-35 Baja california Sur.
Los estados de la República Mexicana que registraron menores precios al promedio nacional al cierre de la primera quincena de abril fueron los siguientes: Chihuahua 0.10, Michoacán -0.07, Chiapas -0.09, Guerrero -0.19 y -0.26 Tlaxcala.
Los menores precios se registraron principalmente en Tomate verde -28.0, Jitomate -21.6, Pepino -14.2, Electricidad -12.2, Gasolina de bajo octanaje -10.3, Gasolina de alto octanaje -9.7, Calabacita -9.6, Transporte aéreo -6.8, Servicios turísticos en paquete -3.3 y -1.0 otros alimentos cocinados.
Con el fin de reducir el precio de las gasolinas a los consumidores, se continuaron con los cambios de la estrategia aplicada desde el sexenio pasado que permitió incrementar los márgenes de utilidad de los concesionarios a expensas del aumento del precio a los consumidores, mediante nuevas acciones orientada a combinar la reducción de los impuestos con el aumento de los estímulos fiscales, aplicando el seguimiento diario de precios y cantidad correcta de entrega a los consumidores de las gasolinas Magna, Premium, Diésel, Turbosina y Gas, lo que permitió contribuir en la reducción de la inflación al cierre de la primera quincena de abril del 2020.
Los avances significativos que permitieron alcanzar una deflación histórica en nuestro país, se registró en los energéticos que alcanzo una tasa anualizada de 9.37 por ciento en 2018 durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, se redujo a 8.68 en 2019 hasta lograr un mínimo nivel de deflación del -15.36 por ciento en la presente administración pública al cierre de la primera quincena del mes de abril del 2020, demostrando y comprobando plenamente el cumplimiento de mi trigésima tercera prospectiva al revertir los precios de los energéticos.
Variación Anual del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de Energéticos 2018-2020
Variación porcentual anual en primera quincena de abril
Años %
2018 9.37
2019 8.68
2020 -15.36
Fuente: “Evolución Anual del Índice Nacional de Precios al Consumidor de Energéticos 2018-2020”, Lic. Alberto González Káram, Presidente de la Comisión Binacional de Asuntos Fronterizos del Colegio Nacional de Economistas, A.C. (CNE) y Vicepresidente del Colegio de Economistas del Noreste de México, A.C. (CENEMAC), Investigación Especial, Abril del 2020.
Con la Declaratoria Sanitaria de la Fase 3 de la Pandemia del Coronavirus (COVID-19), se inicia la preparación de la planeación y programación de la reactivación económica y social de México orientada a beneficiar 88.9 millones de mexicanos, misma que se lleva a cabo mediante el Programa Emergente para el Bienestar y el Empleo, y el Decálogo Financiero que cuentan con una cuantiosa derrama de recursos federales y financieros por 2 billones 815 mil 256 millones de pesos equivalente a 11.26 por ciento de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en el ejercicio fiscal del 2020, lo cual contribuye en la reapertura económica trilateral el próximo 1o. de julio con la entrada en vigor del Tratado Comercial México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) para recuperar nuestra primera posición como el mercado con mayor volumen y valor económico a nivel mundial.
Es recomendable aplicar las medidas adecuadas, correctas y oportunas durante la Emergencia Sanitaria de la Pandemia de Coronavirus (COVID-19) para alcanzar una inflación baja y estable que sea menor a la meta del 3.0 por ciento al 31 de diciembre del 2020, entre las que destacan las siguientes: continuar apreciando la cotización de la moneda nacional para compensar las presiones que se presenten por factores externos o internos en lo que resta del año; reducir las tasas de interés o costo del dinero; consolidar la aplicación de los precios de garantía para evitar incrementos en los precios de los productos agropecuarios; combinar adecuadamente la reducción de impuestos con la ampliación de estímulos fiscales para reducir los precios de la gasolina Magna, Premium, Diésel, Turbosina y Gas, como abatir las tarifas de energía eléctrica industrial, comercial, turística, agropecuaria, pesquera y de los hogares o economías domésticas; evitar que se continúen debilitando las finanzas públicas federal, estatales y municipales; ampliar la consolidación de compras y contratación de obras del sector público federal, estatal y municipal para reducir las precios de las adquisiciones, arrendamientos y servicios, en especial servicios médicos y medicamentos; consolidar los aumentos al salario mínimo y continuar las revisiones salariales, a fin de evitar presiones de costos, posibles incrementos de precios y afectaciones al empleo formal e informal.