Advierte IMSS sobre los riesgos de pasar del calor al aire acondicionado
- Recomendó se limpien los filtros de aire, según las necesidades para evitar que se acumulen virus y bacterias que pueden provocar algunas enfermedades en la garganta como carraspera irritación.
Reynosa, Tam.- Durante esta época de intenso calor por la elevada temperatura, que se prolifera por encima de los 30 grados, la población acostumbra refugia en uso de los equipos de aire acondicionado, sin embargo, la consecuencia de este oasis urbano puede traer complicaciones en la salud, advirtieron especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social en Tamaulipas.
La doctora Aracely Magdalena Garcia Hernández, directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 33 del IMSS en Reynosa, comento que estas alteraciones en la percepción del frío y el calor reta al sistema inmunológico, que cual debe adaptarse a los cambios de temperatura abriéndole la posibilidad de que en esos momentos virus y bacterias invadan el organismo humano.
Esta situación reveló la doctora, favorece la aparición de enfermedades como catarros, faringitis, rinitis, dolor de cabeza, náuseas, manifestando problemas de garganta o contracturas musculares.
Para contrarrestar estos males explicó Garcia Hernandez, es necesaria la ingesta de antiinflamatorios y abundantes líquidos, presentando mejoría en uno a tres días. No obstante, si el proceso se complica, con una infección agregada la recuperación puede prolongarse entre cinco y siete días y requiere del uso de antibióticos indicados por un médico.
La directora de la clínica N° 33 del IMSS recomendó mantener la temperatura de 22 a 24 grados, de modo constante a todos los ambientes, para disminuir la diferencia con la temperatura exterior; ventilar una vez al día los lugares cerrados, donde se concentran los gérmenes.
Además de limpiar con regularidad el filtro del aire acondicionado donde se acumulan gérmenes y polvo; alejar a los niños del frío directo que emite el aire artificial; y aumentar progresivamente la temperatura del hogar antes de salir para permitir que el cuerpo se adapte al calor del exterior.
Finalmente en caso de presentar algo de síntomas o empeore el problema, acudir a la unidad de medicina familiar (UMF) más cercana para así recibir un tratamiento adecuado.